miércoles, 30 de noviembre de 2022
martes, 29 de noviembre de 2022
Un muso que también es musa
José Pérez Ocaña |
Anoche vimos el maravilloso documental realizado por Ventura Pons en 1978: Ocaña, retrato intermitente. Descubrir aquella otra Barcelona, donde este cantante, queer, pintor, actor, amante del folclore/punk, se pasea por la Rambla, y canta coplas en bares desaparecidos (o más bien que han desaparecido a golpe de especulación), es una experiencia muy recomendable.
Son muchas las frases que lanza en ese hablar rápido a la cámara, y que intentaré conservar en mi memoria. Entre ellas, la respuesta a la pregunta: ¿Por qué vas a veces desnudo?:
¿Y por qué la gente va vestida?
sábado, 26 de noviembre de 2022
jueves, 24 de noviembre de 2022
lunes, 21 de noviembre de 2022
Mis verdaderos amantes
Camille Jourdy |
A estas alturas, es una redundancia, lo sé. ¿Pero qué haría sin libros, y sus hermanos los cómics? Rosalie Blum es de los mejores que tengo. Si fuera tan fácil como aferrarse a páginas elegidas para curar bajones del día a día...pero la cuestión es que lo es.
jueves, 17 de noviembre de 2022
domingo, 13 de noviembre de 2022
Celebrando una década de doce años
¿Qué eres para mí, BLOG?
Desde que apareciste in my life en el 2010,gracias a mi segundo editor Daniel Ramos (Daniel,¿te acuerdas cuando me dijiste muy serio que "sin el Facebook todavía", pero que sin un blog, nada podía hacer como escritora?). Ahora me río con una felicidad algo aliquebrada porque sigo igual, escribiendo casi que solo para mí misma, con una muy pequeña y fiel tribu lectora eso sí, cinco o seis libros publicados, unos artículos aquí y allá, relatos y poemas en alguna que otra plataforma, muy pocas entrevistas, más pocas aún presentaciones, finalista de un concurso, y poco más. No obstante, qué razón tenías...
En realidad, la vida entera es una cuestión de perspectiva. Y ese muy mínimo listado, ya es mucho más de lo que antes de escribir (es decir, de niña), podría soñar.
Pero tú, al margen de todo esto, sigues en pie: blog. Con esa magia anacoreta que te distingue de cualquier otra red social. Porque simplemente, no eres una red social. Ni un diario, ni un tamagotchi, ni una madre, ni una amiga, ni un hijo, ni un padre, ni una amante. Factotum, oh eso sí... sabia definición de Paula Einöder. ERES ESO y mucho más. Solo me pesa que un día se apague del todo internet, con tanta historia energética, pandemias, guerras, y ( ) no escribiré la palabrota que tendría que estar entre los paréntesis.
Eso y más que la fidelidad, la dependencia.
Depender como se depende de todo lo bueno.
Y que al final, resultes ser, (aunque estoy segura de que no),
escolopendra.
martes, 8 de noviembre de 2022
Cierto pandemonio visual
Solveig Küffer |
pinte con mayor claridad
el vicio
de la soledad de nuestros
tiempos, en las burbujas
familiares/de amistad,
y que abarca incluso la
animalia.
Nunca mejor dicho:
Una imagen vale más que...
sábado, 5 de noviembre de 2022
Jugando a buscar contrastes
Lo bueno de fotografiar, es que permite observar desde otra dimensión, pero no de manera sincrónica, sino, tiempo después. Pueden ser días, semanas, meses, o para esta foto en particular de una second hand de Kobe, años. Lo malo de fotografiar sería no obstante, perderse por completo en esa no sincronía. No vivir el momento como se merece.
Por eso no fotografío demasiado en comparación con otras personas que veo y que conozco.
Acabo de descubrir los escalones de la foto que saqué de esta tienda de la increíble ciudad japonesa en el 2009, y solo puedo recordar de dicho momento, la fugacidad. Que solo estuve en el país tres semanas cuando debería haberme ido a vivir (como pasa siempre), para poder apreciar sin prisas todos sus tesoros. Me gusta encontrar decadencias que en teoría tienen fama de ser propiamente chinas, en esquinas, suelos, techos, y otras arquitecturas aparentemente invisibles, de países que exhiben pulcritud y perfección.
Estos ladrillos como escalones, ¿son producto de una finalidad estética o de una carencia económica? Podría ser tanto una cosa como la otra. Pero el resultado es hermoso, con guiño anarco/retropunk, común en ese país.
Recuerdo la ironía triste en las palabras de mis amigas japonesas cuando yo les hablaba de esa supuesta perfección: En Japón hay gente que vive en la calle.
La respuesta a aquel comentario, que no fue planteado como una pregunta, la descubrí en Tokio, cuando me encontré cara a cara con una mendiga japonesa muy mayor por primera vez. Yo cruzaba una calle y la miré. Ella estaba en la acera y me sonrió. Fue una sonrisa de flechazo, plena, de ojos más plenos todavía, como de madre que te pilla en medio de una aventura que sabe es crucial para ti, pero peligrosa.
Qué suerte que de aquel instante, más corto que un instante en realidad, no hice la foto.