lunes, 25 de diciembre de 2023

Feliz Ninidad

Artsenal

                                                                          Mi árbol favorito

jueves, 30 de noviembre de 2023

Si alguien quiere regalarme un libro


 

                                                                       Que sea este...

martes, 28 de noviembre de 2023

Conjurada en O temple


        Los grandes libros se encuentran en las paredes más inesperadas

martes, 21 de noviembre de 2023

Uno de Alfonsina


 Palabras a un habitante de Marte


¿Será verdad que existes sobre el rojo planeta,

que, como yo, posees finas manos prehensiles,

boca para la risa, corazón de poeta,

y un alma administrada por los nervios sutiles?


Pero en tu mundo, acaso, ¿se yerguen las ciudades

como sepulcros tristes? ¿Las asoló la espada?

¿Ya todo ha sido dicho? ¿Con tu planeta añades

a la vasta Armonía otra copa vaciada?


Si eres como un terrestre, ¿qué podría importarme

que tu señal de vida bajara a visitarme?

Busco una estirpe nueva a través de la altura.


Cuerpos hermosos, dueños del secreto celeste

de la dicha lograda. Mas si el tuyo no es este,

si todo se repite, ¡calla, triste criatura!

                                                         Alfonsina Storni

                                  

viernes, 17 de noviembre de 2023

Apoyo en creación textual/escritura creativa

Joey Guidone

 Con base en A Coruña, con la diferencia de que ya disponemos de sala más o menos fija. Se trata del emblemático espacio de mediados del siglo XIX Circo de Artesáns.

Para este otoño y este invierno, y...

Vuelta a empezar el ciclo de las consonantes, las cenizas y las plantas. 

Presencial, online, como gustes. Está siendo tan fructífera esta nueva tanda de escritos, que hasta estoy tentada de llevar un termo con chocolate caliente para compartir. Del Bonilla, eso sí, que para eso me compré una tableta bien gruesa hace poco, y ya va siendo hora de estrenarla. 

¡Os esperamos!

domingo, 12 de noviembre de 2023

En O Vello Cárcere


 

                                                                                   Van a matarnos; pero venceremos.

                                                                                                             Castelao

                                                                        

viernes, 27 de octubre de 2023

Un trocito de Capítulo piloto de una sitcom con posibilidades

Ana Castro

 Dolores y Pilar. Cenicero en medio de la mesa, en un cuarto de limpieza en uno de los institutos más grandes de Galicia. La boca mal pintada de Pilar no se callaba un segundo y se le sumaba su mano suelta que no paraba de tocar a quien la escuchaba. Además solo sabía hablar gritando. Dolores era un poco más joven, buena oyente, alguna sonrisilla entre calada y calada mientras escuchaba. Le gustaba escuchar. La entretenía y era gratis.

El cenicero siempre bastante lleno ya a las ocho de la mañana y eso que entraban a las seis. El suelo estaba lleno de productos de limpieza de colores chillones que insinuaban que no te los bebieses. Había productos para todo. Algunos muy específicos, que servían, por ejemplo, para limpiar puertas barnizadas por algún barniz muy concreto para una madera también concreta. No sé si los usaban correctamente, sé que muchas veces los mezclaban para sumar sus características y poder limpiar un poquito de todo. Hacían bien.



miércoles, 13 de septiembre de 2023

Poema a una prima


 




Se dice que el dolor inspira

pero tantas veces la escritura

busca algo más primario.



Algo urgente. 

Tanto más vital y urgente

que el arte, que la poesía.


El arte no es nada al lado

de ese algo.


Lo que no se pudo

decir, cuando no es posible estar.

Más allá del tiempo y el espacio.

Desde que éramos chicas, me decías (prima). 

No creías en la muerte.

Somos todo lo que recordamos,

nos canta Gabo Ferro.


Y es por ese recuerdo nuestro, Adriana,

que brillarás siempre en tu luz.









lunes, 28 de agosto de 2023

Un beso es mucho más que eso


¡Es un símbolo potentísimo de lo que representa nuestra exposición constante a situaciones indeseables por parte de machirulos que siguen siendo plaga!  Aquello de "no es para tanto", no cuenta en absoluto, pues con el dejar pasar, jamás llegaremos al respeto, a una igualdad de derechos entre ellos y nosotras efectiva. También las palabras y los gestos por parte de varones que se lucen con los peores códigos del machismo más deleznable, son de juzgar. Esta situación trajo a mi mente de forma automática, un suceso muy repugnante vivido hace unos años con un señor que bloqueé de mi vida para siempre. Si bien no llegó a los besos (que yo sepa) con alguien que se decía "mi amiga", y además "feminista" y que por supuesto no es ninguna de las dos cosas, sí que llegó a comentarios muy acosadores, a la violencia sexual indirecta con ella de distintas maneras. De hecho la violencia social indirecta: (miradas insistentes, insinuaciones, acercamientos que no respetan nuestro espacio personal) es la norma en estos tiempos, pues aquello de tocar culos sin permiso ya es considerado demasiado bestial. Pero la actitud de esa supuesta amiga, lejos de reconocer el abuso, un abuso que se suma al de poder como reconoció Jenni Hermoso, fue de gritar a los cuatro vientos por un lado que la situación no era consentida por su parte, pero paradójicamente, tratarme a mí de pirada y de defenderlo a él, con comentarios del tipo: "Te volverías loca Rosanna si te molesta cada cosa que hacen los hombres." No, no me volvería loca, porque la prueba es esta, entre una de muchas que brotan cada hora, y que demuestra que la gran mayoría no aceptamos la violencia sexual. Aun así, si volverme pallá incluye este tipo de lucha, entre muchas otras, no me cansaré de gritarlo:

¿LOCA YO? POR SUPUESTO, Y A MUCHA HONRA!

 

viernes, 25 de agosto de 2023

Éste es su segundo bebé

 

"Éste es su segundo bebé, tuvo un hijo, una vez. Me enteré en el Centro porque solía llamarlo a gritos por la noche, como las demás pero más ruidosamente. De modo que debería ser capaz de recordar esto, de recordar cómo es y qué ocurrirá. Pero ¿quién puede recordar el dolor una vez que éste ha desaparecido? Todo lo que queda de él es una sombra, ni siquiera en la mente o en la carne. El dolor deja una marca demasiado profunda para que se vea, una marca fuera del alcance de la vista y de la mente."                        Margaret Atwood         El cuento de la criada

¿Anónimo? En una calle de Bilbao

lunes, 21 de agosto de 2023

El único recuerdo amargo de Gijón

Cimavilla

 

Claro que sigo pensando que viajar, realmente, es vivir como mínimo medio año o casi en una ciudad, pueblo o aldea. Pero desde esta perspectiva, sería prácticamente imposible conocer mucho mundo. Entonces, nos acercamos al problema, en el que solemos caer: Nos trasladamos a un lugar por menos tiempo con tal de pisarlo. Con muchísima suerte, unos cuantos meses, con una suerte moderada, un mes. Para luego ya con tal de movernos, irnos por unas semanas o unos días que terminan ocasionando más estrés que otra cosa.

Porque no siempre, para nuestra desgracia, contamos con proyectos y estadías pagadas cuando viajamos por trabajo. O no siempre nuestras amistades y familiares nos abren las puertas de su casa. Ojalá así fuera, pero no. Y cualquiera de nosotras termina durmiendo donde si pudiera, no dormiría: El hotel o habitación pagada, el Airbnb, el piso turístico... Intento evitarlos, pero cedo.  Aunque tengo que reconocer con cierta vergüenza que hay una impersonalidad aséptica en la habitación de hotel que cada tanto necesito. Una limpieza esmerada y en teoría una especie de paz rara que mi cuerpo y mi cabeza me imploran. También la divina soledad monjil. Cuando la habitación es individual, obvio. Creo que tiene algo que ver con lo que me parece (invento, porque no tengo diagnóstico de esto) podría ser obsesión maníaco-compulsiva. De todos modos, esta costumbre no es algo que me enorgullezca, porque no me gusta lo que representa. Por eso, hace poco, y gracias a mi querida amiga Sílvia Font me hice couchsurfer. Es una plataforma interesante, la recomiendo.

Se trata de una buena alternativa a todo lo anterior.  En mi caso, no obtuve estadía porque mi hipotético anfitrión no tenía sitio durante los días señalados. Pero hizo de guía de la mañana a la noche, con viaje incluido para mí y dos viajeros de Irán. Todo de forma gratuita.  Y a lugares que de otra manera, hubiera sido imposible ir por lo inaccesible. Paisajes que de tan fascinantes, entran en la categoría del sueño o pesadilla de la buena.

La satisfacción de no tener que pagar para todo es inmensa. Estoy deseando que él venga a la Coru para cocinarle (es lo que le ofrecí en el trueque y aceptó de buena gana). Aunque, ¿cocinarle de la mañana a la noche? Bastante agotador. Quizá podría organizarlo así:

-Una mañana de compra conjunta en el mercado de la Plaza de Lugo.

-Cocina en casa a mi cargo, aunque él podría colaborar como pinche.

-Degustación de la comida y café.

-Invitación a cenar a un Furancho. 

Todo a cuenta de la casa, que el trueque, es el trueque.

miércoles, 16 de agosto de 2023

¿Quién se atreve a negar la prostitución de quien publica?

Joey Guidone

 









Los cincuenta en mí, (no sé en vosotras, vosotres y vosotros), siento que han tocado una fibra

que permanecía muy escondida en alguna zona tabú de mi cuerpo. Será el efecto traumático o siendo más sutiles, "psicológico" del medio siglo, I dunno. Como que cada vez más, siento que gano libertad para decir y escribir lo que me sale de... Por suerte, en tiempos de enjambres digitales, siempre se podrá escribir. No Ray Loriga, lo vuelvo a decir, no tenías razón: Lo peor que le puede pasar a un escritor NO ES no ser escritor, porque  están y estarán SIEMPRE las divinas plataformas y los blogs. Pero te disculpo, porque eso que largaste casi sin pensar fue antes de esta adictiva locura de pantallas. ¿Ni idea tenías de la que se nos venía encima verdad?

Nadie la tenía en aquello años Ray, nadie.

A lo que vamos, que ya que me peleo y pongo a caldo día sí día sí con/a editoriales, aunque luego, a veces, solo a veces, me retuerza del arrepentimiento, por suerte están mis adoradas siete gigantas para bancarme la cabeza.  Y quiero decir, porque lo tengo que decir, que el otro día visualicé una entrevista a un escritor que me parece interesante pero cuyo nombre no voy a revelar (porque ya estoy metida en bastantes líos del estilo para cargarme con más), que dijo una Editorial de peso, (cuyo nombre tampoco escribiré, of course), le obligó a quitar toda la obra de su blog a condición de publicarla. Y él por supuesto, aceptó. Lo que más me llamó la atención no es el hecho en sí, sino que este autor de sobras lúcido, ni se lo cuestionara como algo como mínimo, sanguijuela y miserablemente poco solidario y eurista (ya no se dice pesetero, qué lástima, sonaba mejor). Llamadme lunática o lo que resulta mucho más suave: "utópica", pero a mí, si me hacen mandar a la dimensión desconocida, siendo in extremis poética con la descripción que el doloroso delete implica, mis textos más amados de su cuna original que es mi blog, más allá del tiempo y el espacio, de acceso LIBRE para cualquiera, en un mundo donde todo se monetiza, creo que entraría en coma del disgusto.

Y ojito, que no estoy diciendo que no lo haría, aunque por suerte y por ahora no haya tenido que hacerlo, que ya son 50 y es tiempo de cobrar bien por lo que aunque parezca extravagante, sí, señoros, es un trabajo como cualquier otro. Pese a que ese algo implique prostituirse. Que sí, que a eso te obligan la mayoría de las Editoriales, a prostituirte de las maneras más sofisticadas. ¿Cómo negarlo todavía a estas alturas? Podría dar unos cuantos ejemplos vividos en primera persona, pero lo dejo para otra entrada todavía más jugosa. Y aceptamos. Vaya si aceptamos. Pero luego no creamos que son solamente putas quienes lo hacen con el cuerpo. Que con el cerebro y el alma es mucho, pero que muchísimo peor...


domingo, 30 de julio de 2023

Vete, amigo mío

La casa de los cuervos, Reikiavik

 


¡Vete, amigo mío, y buen viaje!

Eras solo uno de mis amantes, hallaré ciento.


                                                             Poesía popular de las mujeres pastún de Afganistán

martes, 25 de julio de 2023

Manolita

Vincent Van Gogh

 NÓS NUN EMIGRAMOS por cuenta d'unos zapatos. Mio padre encargó-y a un pariente d'Arxentina que-y mandara unos zapatos aparentes de los d'ellí pa llegar curiosu a Buenos Aires que nun quería parecer un paletu colos chanclos de mecer. Pero aquellos zapatos ente uno y otro nun acababen de llegar y cuando por fin llegaren, taben esfechos del too como si fueran de cartón. Sería coles humidances del viaxe o qué sió qué pero'l casu ye qu'a mio padre aquello decepcionólu tanto que desengañóse de marchar y al final nun emigramos. Yo digo que quedamos equí de probes por cuenta d'unos zapatos.

                                                                                                  Berta Piñán

miércoles, 28 de junio de 2023

Taller Obradoiro Workshop Escritura Santiago de Compostela

eltarrodeideas.wordpress.com

           Desde el año 2010 que me aventuré por primera vez en el acompañamiento a escritoras y escritores potenciales, han pasado muchas cosas. El inicio fue en la Cárcel catalana de 4 Camins. Y he dicho en más de una ocasión, que aquel taller donde predominaban los haikus e interesantísimos análisis de lecturas con escritores privados de lo más esencial (la libertad), fue uno de los trabajos que más disfruté en mi vida. Luego nos mudamos durante un año a Shanghái, y si bien trabajé mucho allí como profesora de español y mediadora cultural, los talleres de composición textual y escritura creativa, quedaron aparcados. En el 2012, un nuevo destino: A Coruña, y pocos años después (unos dos), comenzaron a aparecer tímidamente personas interesadas en este acompañamiento. No niego que no son talleres típicos. A más de una "alumna" (no me gusta el concepto, pero lo utilizo a falta de uno mejor), tuve que decirle incluso al inicio que no podíamos seguir, puesto que en el hipotético caso de continuar, deberíamos dar vuelta la tortilla, y enseñarme ellas a mí del enorme talento que tenían. Por un lado, un orgullo como formadora, claro que sí, pero recuerdo uno o dos casos en concreto en que insistieron en continuar, a lo cual me negué, por una cuestión de dignidad profesional y coherencia con mi discurso o algo similar. Me permito abrir otro paréntesis aquí para exponer que me gustaría  que esta actitud en terapeutas mentales abundara más de lo que abunda. Por más que los talleres de escritura y las terapias son cosas distintas, sí que hay varias similitudes. Siendo la principal, el enganche que se crea por ambas partes, y lo aliviador para la mente de los resultados. Por desgracia, la mayoría de los terapeutas alimentan esta especie de simbiosis en lugar de cortarla a tiempo. Y no saben o no quieren ver, que en en más casos de los que nos imaginamos, también aparece en escena la famosa tortilla, y están las pacientes más sanas que sus terapeutas. Pero, ¿cómo decirle que no a 50 pavos como mínimo la sesión? (En terapia claro, en talleres de escritura los precios son mucho más normales, al menos en los míos). En fin, más vale dejar este tema por aquí. Volviendo a mi propio camino, me hice y me deshice como autónoma, y en el 2016, esta vez en Hungría, estos obradoiros que son nómadas en esencia, continuaron dos años más en ese hermoso país, del cual surgieron amistades extraordinarias.

A pesar de ser un trabajo, no lo siento como tal. De todos los que he tenido (algunos empleos han sido en verdad muy extraños), puedo afirmar que llevar estos talleres lo vivo como una cotidianeidad necesaria. Será porque escribo mucho también, y dichos espacios compartidos con más gente afín, son una continuación de la escritura, como una extensión de mi propia piel.

A partir del 2020, y nuevamente en Galicia desde el 2018, decidí que quería seguir en ello. No creo que pueda dejar de acompañar a personas que aman la escritura y la lectura. Llevo esta pasión demasiado arraigada como para abandonarla definitivamente. Podrá haber descansos. Incluso largos. Pero nada más. Lo que voy, es añadiendo opciones. Ahora mismo por ejemplo, además de los típicos encuentros online/presencial, me apetece moverme hasta la ciudad peregrina... En honor a un proyecto peregrino hasta el fin de los tiempos per se...

viernes, 23 de junio de 2023

Aunque el verdadero solsticio era el 21 de junio y no el 23


                                                     Noite de lume e meigas!!!

miércoles, 21 de junio de 2023

Los viajes de Mayday


                                              ¡Todavía en la preciosa tienda de Barcelona AIXŌ

viernes, 2 de junio de 2023

Cosiendo enanas blancas

Cathy Burghi

 

                                                ¿Qué puedo decir yo de la perpetuidad?

                                            Ahora, cuando no hay palabras……………….

                                    porque la gula crea vacío: usemos las ventanas

                                  las pesadillas divinas    los cuadros pastosos

                                                                                     de colores fulgurantes

                                  

                                                       

                                                   Masa cruda de pan: sabes a tierra

                                          

                                     pupilas lanzan esa nueva lengua SIN LETRAS

                                        aunque todo amor tenga un algo de serpiente.

 

                               Pero cada trocito de ella vive y guerrea,

                                           sin cabeza,

                                  sin patas, puro tronco.

                                            Se retuerce y vive.

                                                 Que el movimiento eléctrico es

                                                           la reina de las luchas.

 

                               Por eso madre muerta, decidí un día,

                                                del 20 (pan) démico

 

                                         Quizá/vamos a ver/lo pensaremos:

                     

                       Ser ¡yo! Misma MADRE

 

                                    Pero no pudo ser, por esa maldición del inicio,

                                                                           por esa::::::::::::::::::::::::::::

                                            lotería siempre absurda a veces sabia del destino:

                                      Que hablar de inicio,

                                            ya lo sabes,

                                   es hablar siempre de THE END

                                                                

 

                                                 del hilo de esta vida, nuestra blanco, blanco

                                                       

                                                        en la bola enorme que gira y pende

                                                         que gira lenta/tontamente y pende

                                                                                          todavía.

                                                     

                                                

                                                 De leche primera y materna que incluso a mí,

                                                 (mujer NOMO),

                                                                                 por años

 

                                                                              me alimentó.

 

                                    

                                

                             

 

                      

 

                                          

                           

 

                                   

 

                                    

 


domingo, 28 de mayo de 2023

Una pequeña cosa en el camino


Íbamos caminando, sin prisa. Él había llegado ayer y yo ese mismo día, y éramos de fuera. Personas extrañas en un lugar tan pequeño, que, visto desde el faro, parecía una maqueta, de las de juguete.

Desde el principio me molestó su insolencia. Si alguien a quien acabas de conocer, resulta ser petulante desde el minuto uno, mal augurio. Nunca hacía preguntas, y se burlaba sutilmente de mi inglés. Aquel paseo, fue el primero y último que dimos durante nuestra convivencia.  Dicen que las personas idénticas en aspectos definitivos de la vida, se repelen. Creo que entre yo y él, ocurrió algo así. Sin embargo, ciertos descubrimientos de la naturaleza en aquel paseo, el fijarnos en un mismo elemento misterioso con una curiosidad fuera de todo límite, no dejó de ser un inexplicable punto de unión. 

Al fin de al cabo, como las mareas, nos define la electricidad. 

Y qué verdad lo de la química en las relaciones. Somos inicio y fin.

lunes, 22 de mayo de 2023

Curiosidades de toilets


 






Sí, algunos escritos de los lavabos

de los bares, la verdad que sacan la risilla.

miércoles, 17 de mayo de 2023

Promesa incumplida

demisinstantes.blogspot.com

 Y aunque juré y juré a lo largo de todos estos años, que nunca te perdonaría,

el enigma que conforma esta especie de juego macabro que es el vivir, sigue sin encajar en un punto culminante.

Tanto tiempo hizo falta para darme cuenta de que no me amarga precisamente no encontrar (por no buscarla) la pieza perfecta y final del odio eterno.


sábado, 22 de abril de 2023

First presentation of Mayday: 69 rescue poems in Iceland!!!

 





                                       Tomorrow, you are welcome!  ¡Mañana, bienvenides!

lunes, 17 de abril de 2023

The minor thing

Mumamel

 

                                       

                                              ...La menor cosa tiene algo de desconocido...

                                                                                           Guy de Maupassant

miércoles, 5 de abril de 2023

Agencia literaria La Caprichosa, ¿u otra cosa?

Freepik

 


                                  No suelo comentar mi experiencia con agencias literarias, principalmente porque solo he contactado con dos en mi vida. Pero en estos tiempos donde tanto la escritura como la violación y el manoseo de la misma (que puede llegar a ser la crítica con segundas intenciones, y al final del texto explico en qué consisten esas segundas intenciones) son más prolíficas que nunca en parte debido a las colmenas digitales, pienso que mi experiencia puede ayudar a otras personas. Estoy más que convencida de ello. Es por eso que me decidí a escribir esta entrada. Por otro lado, llevo una racha bastante desagradable en estos últimos meses en lo que respecta a enviar textos para concursos o evaluación. No exagero si digo que me han propuesto publicar una de mis novelas en tres editoriales en lo que va de año, y todas ellas eran más que dudosas en cuanto a condiciones de contrato. En una en específico, ya hay varias denuncias en marcha; por suerte tuve el mínimo de intuición para darme cuenta a tiempo. Pero no me ocurrió lo mismo con esta Agencia literaria de la que ahora os hablo, cuyo nombre ya tira bastante para atrás por lo cursi: La Caprichosa, puesto que a veces la ansiedad por publicar nos puede, sobre todo cuando somos prolíficas escribiendo, pero no publicando. El problema de la impaciencia, es que no nos deja guiarnos por la sabia Diosa que nombré antes: la intuición. Y es ahí cuando llega la culpa y el arrepentimiento. Como siempre tarde, de lo contrario no hablaríamos de culpa ni de arrepentimiento.

Ah, sí, pero de los errores se aprende, al menos me queda el refrancito más querido por las madres. Pues sí y no, pero no voy a entrar en esto ahora por una cuestión de tiempos.

Las Agencias literarias en verdad, y las editoriales en general, funcionan (o al menos deberían funcionar) a la par que los Hospitales y los centros de salud mental. ¿Qué tienen en común estas entidades? ¿Por qué no nombré una empresa cualquiera de atención al público? Pues porque las Agencias literarias, trabajan con material sensible: con el corazón y el alma que puede ser una novela, o un "simple" poema de tres renglones para alguien: la persona que la escribió. Del mismo modo que en un Hospital trabajan con corazones, pero de los palpitantes. A lo que me refiero es a que los atributos que ha de tener SÍ O SÍ alguien que trabaja con este tipo de material, ya sea físico o simbólico pero que en el fondo viene a ser lo mismo, son muy pocos en realidad, (en mi opinión son cinco) pero de una calidad altísima, casi diría que ya entran en otros terrenos, sin ir más lejos, el del Budismo. ¡Cuánta pero cuánta meditación nos hace falta humanidad y qué desprecio seguimos teniendo hacia ella! Ahora paso a explicar los porqués.  En mi caso, luego de la lectura de mi novela, me llegó una valoración de una trabajadora de esta Agencia que puedo definir como las antípodas de una valoración. Porque aunque una obra sea "mala" para la persona que la lee, desde una Editorial o Agencia literaria que pretendan serlo, el feedback siempre debe ser valorativo, y en el caso de fallar en esto, como mínimo debería ser escueto. El problema con la carta que me envió esta señora es por un lado la extensión: sí, tengo que reconocer que se tomó su tiempo. 

Pero una extensión exaltada, fallida, sospechosa, centrada en unas opiniones donde los cinco atributos que conté antes y que ahora voy a pasar a nombrar, brillan por su ausencia:

1. Humildad: Este es el atributo estrella y que puestas a calificar (aunque odie hacerlo) a esta Agencia le pongo cero. Lo ejemplifico con una de las frases que me quedó grabada de su carta: "Afirmas que tu novela es experimental, pero yo, que soy una gran lectora y amante de la ciencia ficción, no lo veo así". ¿Es necesario que me haga saber que es una amante y experta en ciencia ficción para decirme lo siguiente? ¿Qué encierra en realidad esa afirmación, le sirve para reforzar una seguridad de la que carece acaso? Creo que no hace falta que me extienda en más ejemplos de la falta de dicho atributo fundamental en esta Agencia, pues son todos de la misma tónica.

2. Respeto: Cuando se tiene la intención de despotricar una obra, que desgraciadamente, en este caso, fue de mi autoría, es necesario no atravesar la fina línea que lleva a ridiculizarla (aunque sea sutilmente, que era su idea, pero malograda). Y este es otro tipo de falta de respeto, tan peligroso como el insulto y la humillación directas. Por lo tanto, otro cero también en este punto.

3. Equilibrio: Este atributo es también diamantino. Tiene que ver por un lado, con exponer cuantas más cuestiones positivas se encuentren, y no únicamente una única palmadita en la espalda luego de toda la paliza como le ocurrió a servidora: "Pero la tesis de tu novela es interesante", ¿ah sí? ¿Qué me dirías entonces si no lo fuera, me enviarías una carta-bomba?, y por otra parte con la extensión a la que me referí al principio. Es decir, si a la agente le llega lo que considera un bodrio de novela, lo que no debería hacer bajo ningún concepto es escribir un mamotreto de respuesta casi tan largo como la novela en sí regodeándose en sus opiniones destructivas. PORQUE NO SE OLVIDEN ESCRITORAS/ES, LAS AGENCIAS LITERARIAS NO SON DUEÑAS DE NINGUNA VERDAD ABSOLUTA, SIMPLEMENTE ESPECULAN CON LO VENDIBLE O NO QUE PUEDE LLEGAR A SER UNA OBRA. NADA MÁS. Recuerden La Conjura de los necios y a su desgraciado y genio autor, recuerden. Y antes de escribir un rollo dañino, mejor una frase corta que mil palabras, del tipo: "Le agradecemos enormemente que nos haya enviado su obra, pero no encaja en los parámetros de nuestra Agencia". Por lo tanto, de vuelta el cero.

4. Prudencia: Aquí retomamos el tema del alma, corazón y vida. Qué razón tenían Los Panchos. Dado que una Agencia literaria no es una fábrica de chorizos (en teoría), sino que trabaja con material sensible, (y con sensible me refiero a que como mínimo hay una persona en este mundo que es la autora de una novela para quien ESA novela es SU vida, como ya dije), hay que actuar en concordancia, y ser muy prudentes con lo que se opina. En realidad, este atributo va enlazado con los anteriores, es como que le otorga más intensidad a los ya nombrados, profundizando en la empatía en la que para variar, esta Agencia tiene otro redondo, perfecto y sonriente cero.

5. SAVOIR-FAIRE: No es casualidad que haya puesto esta destreza imprescindible en las Agencias literarias y en todas las profesiones en general con mayúsculas. Yendo al grano, o se tiene o no se tiene. Se tiene, cuando se responde a un supuesto bodrio de novela con pocas frases que si bien están rechazando el texto, no lo parece, pues no dejan de ser por ello valorativas, empáticas, asertivas, con gracia incluso. Cuando esto falla, no hay vuelta de hoja, no hay ni savoir-faire, ni lo que es más grave, experiencia. Experiencia en cómo decir las cosas, que no niego que en muchas ocasiones es la antigüedad del oficio que la otorga. Pero  llegando ya al punto que me interesa, todo se va a la mierda cuando sentimos ese olor, sí, se trata de un olor. Porque, ¿qué hay detrás de un mamotreto despotricador? 
Ay, ay, vayamos a la auténtica verdad del asunto, lo que quiere esta Agencia en cuestión, es vendernos sus servicios editoriales. Dicho claro y pronto. Pero desafortunadamente, no todas las que se hacen llamar Agencias son tal: puertas de acceso a las editoriales, sino que destrozan tu texto apropiándose de él (de hecho, hablan de él con más autoridad que tú misma, me pasó con esta Agencia de la que os hablo) para volver a (des) armarlo ellas o ellos y cobrarte un pastón por la tarea. Doy fe de que esto podría llegar a ocurrirme porque esta señora de "LA CAPRICHOSA" se despidió luego de tanto latigazo que perdí la cuenta, con lo siguiente: 

"Estoy convencida de que volveremos a encontrarnos". 

No, no se trata de una misteriosa y educada despedida, se trata de otro brain washing más: convencernos de que nuestra novela es una shit y que mordamos el anzuelo. Pero entonces, que no se autodenominen Agencia literaria, porque lo que son pura y llanamente, es una Agencia de servicios editoriales más...

Si habéis llegado hasta aquí en la lectura y os sentís identificadas/os con lo que me ocurrió a mí e impotentes para denunciar concursos amañados (el 95 por ciento de ellos, siendo generosa), ya dejó hace unos años constancia de ello el reconocido escritor Alberto Olmos en un artículo que no tiene pérdida: El premio literario perfecto, "Editoriales" y "Agencias literarias" non gratas, contactad conmigo. Por suerte, no habita la soledad en este fango.

jueves, 16 de marzo de 2023

En lo remoto de Islandia


 

El otro día, mientras caminaba a muchos grados bajo cero, de repente, se me saltaron las lágrimas. Sentí que brotaban más allá de mis ojos, que estallaban como chorros desde mi nariz. No sé si debido al frío o a lo sublime de una naturaleza sorprendentemente orgánica y poderosa que en ningún otro lugar de los que viví o visité, había presenciado con tanta vida e intensidad. Y que mana plus ultra de las consecuencias, desde la placenta misma de la Tierra.


martes, 28 de febrero de 2023

Aunque la esencia no exista


 






La palabra escrita mató esa esencia,

que al final vino a ser que sí: existía.


sábado, 18 de febrero de 2023

Semillas de corazón


 Extrañar un lugar donde se ha vivido es como extrañar a una persona que ya no existe. Una mezcla de placer por el recuerdo en sí, y de dolor por la pérdida. 

Un dolor lacerante, y al que jamás nos acostumbramos las personas nómadas, o como mínimo, no sedentarias, como lo son por ejemplo, los árboles. En ocasiones, se extrañan cosas grandes, que jamás volverán a disfrutarse. Como los napi menü de Hungría con sus bandejas de colores gastados y el agua compartida a una jarra o dos por mesa larga, que los encontrarás si vas, pero me arriesgo a decir que tienen los días contados, como todo saldo del comunismo. A veces, lo que se extraña es algo pequeño, chistes internos a propósito de objetos particulares, que no has visto en ninguna otra parte.  Pero quiero detenerme ahora en la persona que se extraña con la locura que provoca la química de la distancia de un país en el que con toda seguridad, no vas a volver a vivir, ni tan siquiera a ir otra vez.

¡El mundo es tan grande! Dicen.

Esa persona existe, te consta. Pero ya no te

recuerda. Y si lo hace, pasaste a ser la 

que se ha ido, por lo tanto, la fantasma.

No obstante, qué maravilla maravillosa

cuando de repente aparece de cualquier

forma (y no me refiero solo a la virtual).

Pasa a ser la confirmación de un sentimiento incalculable y correspondido.


lunes, 6 de febrero de 2023

Sanidade pública forever


 

Eu estarei en Braga, pero ide vós!!!

domingo, 22 de enero de 2023

Mi melódica



No sé siquiera si se llama así

este instrumento. Creo que también se le conoce como órgano de boca. En aquella cocina de Foz, me inicié por primera vez en la brujería.

Mi madre era de revolver cacerolas deliciosas durante horas que, como dije otras veces, eran horas casi estáticas. También porque así eran los pueblos en aquel entonces. Recuerdo que ni yo misma me aguantaba tanto escándalo "musical". Pero ni Elsa, ni Víctor, ni Flavio me decían nada. Me dejaban hacer de todo y soportaban mis caprichos más excéntricos. Muchas veces pienso que tanto mimo fue como la última salvación de estas tres personas, (mi familia nuclear), que murieron antes de tiempo. Primero una, luego otra y luego la otra. Tal cual fichas de dominó. El sacrificio último y más preciado en pleno vestíbulo de la felicidad: La hija menor, con todo lo que dicha promesa conlleva. La imagen que explica esta idea, esta responsabilidad, es la de una firmeza repleta de amor y de cariño en medio de una tempestad donde se filtraba a nuestro pesar, el ser diferentes, la violencia puntual, la enfermedad, la pobreza por temporadas, aunque nunca la miseria.  Y en el medio de todo: locura, arte, lecturas, tertulias hasta las tantas con veraneantes, el vino, las drogas, episodios sagrados en blanco y negro de Félix Rodríguez de la Fuente, los chicharrones, las prostitutas, los recuerdos de aquellos viajes de novela de Víctor: el lobo de mar que fue mi padre, playbacks inolvidables  de Raffaella Carrá, las historias uruguayas de Elsa: la artista por el mero hecho de existir que fue mi madre, nuestras vecinas/hermanas... al fin de al cabo, (MO)VIDA.  ¡Eran los 80!

Sí, aquella cocina era el caos de una familia nada convencional en años donde definir aquello como delicuescencia, sonaba más que ridículo.