jueves, 31 de marzo de 2022

Suerte loca


 

                                   En el naipe del vivir, para ganar, primero perdí.

                                                                   Viejo y bonito tango...

viernes, 25 de marzo de 2022

El sexto sentido del texto


 
Me asusta el hecho de que, cuando escribo, parezco tener un terrible sexto sentido o algo así, cierta intuición. En esos momentos, empieza a trabajar en mí un tipo de inteligencia que en la vida ordinaria sería demasiado dolorosa, pues me resultaría imposible vivir si la usara en la vida.

Anna Wulf en El cuaderno dorado 

domingo, 13 de marzo de 2022

El golpe


 El golpe es mi primera experiencia de escritura colaborativa.

Tras la propuesta, inicialmente me sentí desconcertada. Habituada a "engendrar" mis personajes, a definirlos con tiralíneas, compás y bigotera, sentí que sus trazos absolutamente definidos, de alguna manera, me eran impuestos. Observaba perpleja sus líneas quebradas, curvas, divergentes...Tuve que dejar de lado, no sin sentirme descolocada, la escritora omnisciente que hay en mí y disponerme a la acogida, a la adopción de dos seres conformados, Seba y René, con un pasado y un presente que me asaltaban desbocados. Después de este primer momento de incertidumbre, lo que parecía un hándicap fue tornándose en una oportunidad para deleitarme con nuevas formas, colores, sonidos, líneas temporales... Sutilmente, casi imperceptiblemente, mi alfabeto se vio enriquecido.Me tocó escribir el final, ponerle la guinda a la tarta. ¡Difícil tarea!Cuando por fin rematé, inspirada por unos ásperos apuntes de Mecanizado, observé con detenimiento la tarta de 4 pisos. Corté un trozo y en mi paladar se sucedían 4 formas de contar que hacían de cada bocado una sensación inusual, impactante.Me he sentido afortunada de formar parte de este obrador, de la mano de Rosanna Moreda, maestra obradora donde las haya.Espero que sea el principio de otras propuestas reposteras que, a 8 manos, no solo mejoran el producto final, sino el proceso y a nosotras mismas.Por todo ello, gracias.
                                                                                                                                 Ana Castro